1. La aparición de los equipos fotográficos digitales cambió mi forma de trabajar de forma radical. En mi caso viajaba mucho realizando fotografía deportiva y no tener que estar atado al revelado de los negativos y su posterior envío mediante líneas telefónicas, muy inestables, supuso una mayor rapidez en la llegada de las imágenes a la redacción, considerable pérdida de peso en todo lo que debíamos llevar los reporteros de entonces.
2. Si hoy tuviera que trabajar sobre el terreno en contar una historia en imágenes, sin lugar a dudas, emplearía el móvil cómo una herramienta más y complementaria.
3. Las redes sociales compiten directamente con los medios y agencias, creando lo que los anglosajones denominan: “crowdsourced content”, es decir contenido compartido o complementario, al que se ha criticado por parte de profesionales del sector y empresas generadoras de contenidos, dándose la paradoja de que estas últimas, sin una edición previa ni contraste de veracidad, han publicado, dando por cierta una determinada imagen que luego resultó que era falsa y estaba manipulada.
4. Las redes sociales y su viralidad dan lugar al término actual de “ fotoperiodismo ciudadano”, es decir la imagen que un individuo cualquiera registra y sube a las redes creando una fuente informativa.
5. Por otra parte, las redes sociales, son generadoras de “marca” para cualquier profesional de la imagen, fenómeno que antes era muy complicado ya que quién te generaba “marca” era el medio para el que trabajabas. También estas permiten a los profesionales, y lo que no lo son, agruparse en torno a intereses visuales comunes y poder llevar a cabo un proyecto de forma compartida.
6. Ya no es necesario pertenecer a una Agencia mundialmente reconocida para ser un profesional de prestigio. Hoy se puede conseguir con las herramientas que da el mundo 2.0 y sí el profesional las sabe manejar y desarrollar, podrá a llegar a ser un fotógrafo reconocido y con gran impacto en las redes sociales.
7. La práctica del “botón derecho” y “guardar cómo” es uno de los grandes males del mundo de internet especialmente en este país. Aquí seguimos en que todo lo que hay en la red es “gratis total”.
8. Durante el desastre del huracán Sandy en el estado de New Jersey en 2012, la Editora Gráfica de la revista TIME, Kira Pollack, les dijo a cinco de sus fotógrafos que dejasen sus cámaras profesionales en la redacción y les proporcionó cinco IPhones con los que tenían que cubrir los desastres de la terrible tormenta. Supongo que alguno de ellos, aunque fuese por lo bajo protestarían o pensaban que estaba loca. Pues la portada sobre esta noticia fue con una imagen hecha con el móvil por Benjamin Lowy. Todas las galerías que se publicaron esos días de sus profesionales fueron hechas con el IPhone y además consiguieron 12.000 nuevos seguidores para la revista en 48 horas.
¿La fotografía móvil fue una amenaza para TIME?
9. En los próximos años, el fotoperiodista que triunfe será el que sepa contar y desarrollar una historia y además sea “marca”. Un fotoperiodista vendrá a ser un compendio de guionista, director de cine, director de fotografía, editor y periodista.
10. Probablemente la cámara fotográfica, tal y como la conocemos ahora evolucionará hacia el video. 4K y 5K serán los acrónimos del futuro en fotoperiodismo. De una secuencia de imágenes en movimiento se podrá sacar una imagen fija con calidad suficiente para una portada en papel.
Jon Barandica
